Poemas Con Onomatopeya Para Niños

En este artículo encontrarás una selección de poemas con onomatopeyas especialmente pensados para niños. Descubre cómo estas palabras que imitan sonidos pueden dar vida y alegría a las composiciones poéticas, estimulando la imaginación y el disfrute de los más pequeños. ¡Sumérgete en un mundo lleno de sonidos y versos!

Ejemplos de Poemas con onomatopeya para niños

1. La lluvia en el bosque

En el bosque, la lluvia cae con suave susurro,

las gotas danzan sobre las hojas verdes,

plic, ploc, plic, ploc, suena el chaparrón.

Los pájaros se resguardan bajo el frondoso dosel,

el río canta su canción con sonido de cristal,

splish, splash, splish, splash, se escucha al fluir.

Los árboles se estremecen con cada ráfaga de viento,

crujidos y susurros se mezclan en la sinfonía natural,

cric, crac, cric, crac, acompaña la tormenta.

Y así, la lluvia en el bosque sigue su danza eterna,

creando melodías con sus gotas y briznas,

plic, ploc, splish, splash, cric, crac, música de la naturaleza.

¡Qué hermoso concierto nos regala la lluvia!

Es un poema de vida y renacimiento constante.

2. El galope del caballo

Por la pradera corre veloz el caballo,

el sonido de sus cascos retumba en la tierra,

clip, clop, clip, clop, va marcando el compás.

El viento ondea la melena del noble corcel,

su relincho resuena como música en el aire,

¡hiiii, haaa, hiiii, haaa, se escucha al galopar!

La estampa del jinete y su fiel compañero,

es la imagen de libertad y valentía sin igual,

clip, clop, hiiii, haaa, un dúo en perfecta armonía.

El paisaje se desdibuja a su paso acelerado,

la hierba susurra al ser acariciada por los cascos,

frrsh, frrsh, frrsh, acompaña la carrera desenfrenada.

Y así, el galope del caballo se convierte en poesía,

una oda a la velocidad y la conexión con la naturaleza,

clip, clop, hiiii, haaa, frrsh, frrsh, música de la libertad.

¡Qué emoción nos transmite el correr sin límites!

3. El murmullo del arroyo

Entre las piedras del arroyo se desliza el agua,

un murmullo suave que acaricia los oídos,

glub, glub, glub, suena la corriente tranquila.

Los peces nadan en sincronía con la corriente,

su aleta batiendo produce un sonido sutil,

flish, flash, flish, flash, la vida acuática en armonía.

Las plantas acuáticas mecen sus hojas al compás,

el reflejo del sol danza sobre el agua clara,

brillito, brillito, brillito, luz y color se entremezclan.

El arroyo sigue su camino entre rocas y vegetación,

caracoleando en su ruta hacia el río cercano,

glub, flish, brillito, susurra la corriente en su viaje.

Y así, el murmullo del arroyo nos invita a la calma,

a escuchar la melodía de la naturaleza en movimiento,

glub, flish, brillito, música de la serenidad y la paz.

¡Qué regalo es poder disfrutar de este concierto acuático!

4. El canto de los grillos

En la noche estrellada, los grillos comienzan su concierto,

el chirrido rítmico llena el aire de magia y misterio,

cri, cri, cri, cri, suena el coro de diminutos músicos.

Entre la maleza y los arbustos se esconden los artistas,

su frotar de alas emite un zumbido característico,

bzzz, bzzz, bzzz, acompaña el canto nocturno.

Las estrellas brillan sobre el escenario natural,

la luna ilumina con su luz plateada el espectáculo,

brillan, brillan, cri, cri, bzzz, bzzz, concierto estelar.

El ritmo de los grillos se vuelve hipnótico y envolvente,

transportándonos a un mundo de sueños y fantasía,

cri, cri, bzzz, brillan, brillan, música de la noche eterna.

Y así, el canto de los grillos nos susurra secretos,

nos invita a escuchar la sinfonía de la oscuridad,

cri, bzzz, brillan, cri, brillan, melodía de la noche profunda.

¡Qué maravilla es perderse en este concierto nocturno!

5. El rugir del trueno

En el cielo oscuro, las nubes se arremolinan amenazantes,

un trueno retumba con fuerza y majestuosidad,

¡boom, boom, boom, resuena el rugido del cielo!

Los relámpagos iluminan la noche con destellos blancos,

la lluvia comienza su danza furiosa sobre la tierra,

plic, ploc, boom, boom, la tormenta en todo su esplendor.

Los árboles se mecen al compás del viento huracanado,

las ramas crujen y se doblan ante la furia de la naturaleza,

cric, crac, boom, plic, ploc, sinfonía de la tempestad.

El trueno sigue retumbando con energía incontenible,

recordándonos la grandeza y el poder de la madre tierra,

boom, boom, cric, crac, plic, ploc, música de la furia divina.

Y así, el rugir del trueno nos hace reflexionar y admirar,

nos conecta con la esencia indómita de la naturaleza,

boom, cric, plic, ploc, ¡qué demostración de fuerza y belleza!

¡Qué asombroso es contemplar la danza de la tormenta!

6. El zumbido de las abejas

Entre las flores del jardín, las abejas revolotean trabajando,

su zumbido constante llena el ambiente de actividad y vida,

bzzz, bzzz, bzzz, suena la sinfonía de la labor incansable.

Los pétalos coloridos se balancean con la brisa suave,

el polen se adhiere a las patas de las abejas diligentes,

frrsh, frrsh, bzzz, bzzz, música de la polinización vital.

El sol brilla sobre el jardín en todo su esplendor,

las abejas danzan de flor en flor con destreza y precisión,

bzzz, frrsh, brillan, brillan, danza de la naturaleza en acción.

El zumbido de las abejas nos recuerda la importancia del trabajo,

la colaboración y la armonía en el ecosistema floral,

bzzz, frrsh, brillan, danza de la vida en su plenitud.

Y así, el zumbido de las abejas nos transporta a la primavera,

a la explosión de colores y aromas en el jardín floreciente,

bzzz, frrsh, brillan, ¡qué maravilla es ser testigos de su labor!

¡Qué enseñanza nos brindan con su constancia y dedicación!

7. El aleteo de las mariposas

En el campo soleado, las mariposas revolotean juguetonas,

su aleteo ligero crea un rumor suave y delicado,

fli, fli, fli, fli, suena la danza de las alas multicolores.

Los rayos de sol acarician sus cuerpos etéreos y delicados,

las flores embriagantes les ofrecen néctar y solaz,

brillan, brillan, fli, fli, fragancia y color en perfecta armonía.

El viento acaricia sus alas con caricias imperceptibles,

las mariposas revolotean en un vaivén hipnótico y gracioso,

fli, brillan, fli, brillan, danza alegre de la naturaleza.

El aleteo de las mariposas nos habla de la fugacidad,

de la belleza efímera que nos regala la vida en cada instante,

fli, brillan, danza, fragancia, ¡qué regalo es su presencia!

Y así, el aleteo de las mariposas nos invita a la contemplación,

a la gratitud por la belleza sutil que nos rodea siempre,

fli, brillan, danza, fragancia, ¡qué marav

¿Qué son los poemas con onomatopeya y por qué son adecuados para niños?

Los poemas con onomatopeya son aquellos que utilizan palabras que imitan sonidos reales. Son adecuados para niños porque estimulan la imaginación, desarrollan la creatividad y facilitan la conexión emocional con el texto debido a su carácter lúdico y sonoro.

¿Cómo se puede utilizar la onomatopeya en los poemas para crear un efecto lúdico y divertido para los niños?

La onomatopeya se puede utilizar en los poemas para imitar sonidos reales de una manera divertida y lúdica, lo que atrae la atención de los niños y estimula su imaginación.

¿Qué elementos se deben considerar al escribir poemas con onomatopeya dirigidos a un público infantil?

Al escribir poemas con onomatopeya para un público infantil, se deben considerar palabras sonoras y divertidas que estimulen la imaginación y los sentidos de los niños, así como utilizar ritmos y repeticiones que los mantengan interesados y entretenidos. También es importante crear situaciones y personajes cercanos a su mundo para que se identifiquen fácilmente con el poema.

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